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Jornadas Internacionales de la Edición Católica

Primer Encuentro en Roma del 26 al 29

Las Jornadas Internaciones de la Edición Católica fueron organizadas por el Dicasterio para la Comunicación de la Santa Sede. El mismo se desarrolló en la ciudad de Roma entre el 26 y 29 de junio.

 

El objetivo de estas Jornadas se centró en reunir a los editores católicos que, con su trabajo, contribuyen en la difusión del mensaje cristiano. Resultó importante para reflexionar sobre los desafíos y posibilidades que se abren en la actualidad, en la era de la globalización y la digitalización, al mundo de la edición católica.

 

El encuentro tuvo lugar en el Centro de Congresos de la Conferencia Episcopal Italiana.

 

En diálogo con el Programa de Radio Caminos de Encuentro y la Oficina de Prensa y Comunicación de la Conferencia Episcopal Argentina, Facundo Fernández, miembro del equipo de la Oficina del Libro del Episcopado Argentino, nos compartió su testimonio:

 

¿Quién organizaba el encuentro, quienes participaron y cuál fue el tema específico?

 

El encuentro fue organizado por el Dicasterio para la Comunicación de la Santa Sede junto con la “Editrice Vaticana”, la Editorial Oficial del Vaticano. Colaboró la Oficina de Comunicación de la Conferencia Episcopal Italiana. Entre los participantes resaltó la presencia del Prefecto del Dicasterio, Paolo Ruffini, quien dio inicio a las Jornadas y las finalizó con la presentación de las conclusiones.

 

Asistimos aproximadamente sesenta (60) editoriales de treinta (30) países. Hubo una fuerte presencia europea representada en editoriales de Alemania, España, Francia, Italia, Polonia, entre otros. También de América del Norte; Canadá y Estados Unidos. A nivel Sudamericano; Brasil, Colombia y nosotros desde la Argentina. Acompañaron editoriales de Australia, Sudáfrica, República del Congo, entre otros importantes países. Como temas específicos podemos mencionar dos grandes ejes. En primer lugar el encuentro en sí mismo; el poder encontrarnos todas las editoriales católicas a nivel mundial. Este acontecimiento nunca se había dado. Nosotros en la Argentina, conjuntamente con la Cámara del Libro, nos reunimos 3 veces al año las editoriales católicas que operan en nuestro país, pero a nivel global es la primera oportunidad. La propuesta del Dicasterio fue potenciar la “Cultura del Encuentro” y observar que más allá de los diversos carismas y formas editoriales, todas formamos un mismo espíritu, el de poder transmitir el Evangelio. Por otro lado, como un segundo tópico, hemos hecho mención a la crisis. Crisis a nivel mundial, crisis intrafamiliares, económicas, políticas, de valores, ecológicas. Allí reflexionamos sobre cómo afectan y sobre cómo podemos transmitir el Evangelio en esta realidad, en este mundo. De la misma manera, la crisis en el mundo editorial. Crisis como cambio de paradigmas. Están cambiando las formas de leer, las formas de comunicarse. Debemos abordar el desafío que nos plantean los más jóvenes, quienes tienen otros modos de lectura. Es una realidad que nos toca, como editoriales afrontar.

 

¿Qué nos podes compartir como riqueza?

 

Las riquezas han sido muchísimas. En primer lugar, siendo las enseñanzas del Papa Francisco, que nos llama y nos invita a buscar cada vez más a ser una Iglesia colegial, a buscar ser cada vez más una Iglesia sinodal; creo que este primer encuentro para nosotros, como editoriales católicas, comprender que somos un gran cuerpo editorial, dado que hasta ahora cada editorial estaba inmersa en sus problemas, en su contexto, pero el habernos encontrado todos en un mismo lugar, habernos presentado nos hizo dar cuenta que más allá de las formas y carismas, el habernos manifestado nos permitió darnos cuenta que todas las editoriales tenemos un mismo objetivo; poder transmitir a la cultura el Evangelio, poder evangelizar la cultura que nos toca a cada editorial. A partir de esto, comprendimos que todas formamos un mismo cuerpo. Esto es muy bueno porque entonces podemos tener una mayor comunicación, podemos compartir problemas, desafíos y por otro lado siendo un mismo cuerpo entendemos que no resulta lo mismo presentarse ante una problemática social de tipo global como una editorial aislada que como un cuerpo que representa a todas las editoriales católicas. En segundo lugar, sabiendo que cada editorial necesita subsistir, abordamos aspectos sobre la comercialización. Nosotros, en Buenos Aires, tenemos la Feria del Libro, lo que nos da la posibilidad de entrar en contacto con distintas editoriales a nivel sudamericano, pero el poder encontrar en un mismo lugar a todas las editoriales del mundo acorta muchas distancias y nos permite poder mostrar nuestros productos, nuestros libros a todo el mundo. Como una tercera riqueza, mencionaría la esperanza por la cantidad de proyectos y propuestas para seguir caminando juntos. Han surgido muchas propuestas en este encuentro fueron quizá los primeros frutos para que en los años que siguen, en las próximas jornadas podamos ir cumpliéndolos.  

 

¿Qué experiencia editorial que conociste te sorprendió gratamente?

 

Grandes editoriales sorprendieron gratamente. Resaltaría dos (2) experiencias. Una de ellas, la editorial sudafricana. Ellos hacen lo que llaman “reality magazine”. Desarrollan una revista trimestral, como la que nosotros podemos encontrar en los quioscos en Argentina con temáticas diversas como la moda, actualidad y otros espacios. Lo que ellos buscan es poder presentar el estilo de vida católico. En este magazine muestran personas diversas. Han dado  ejemplos de deportistas, famosos, no famosos, estudiantes, profesionales, padres de familia; distintos tipos y estereotipos de personas en las cuales quienes lo vean puedan sentirse identificados con unos y con otros. El objetivo es expresar que no se divide la fe y la vida, sino que presentamos a la misma persona. Aquella que trabaja, la misma que realiza las cuestiones cotidianas, que estudia, que cocina; mostrando como es su vida siendo católica. Su idea es la integración de la fe y de la vida. Ha resultado una experiencia muy buena que han tenido ellos y que les ha traído buenos resultados. Por otro lado, otra experiencia que resultó se refiere a una editorial francesa. Ellos están comenzando a comercializar en Argelia y han observado que, al igual que en muchos otros países, musulmanes se están convirtiendo al cristianismo. Por este importante hecho, ellos manifestaron una nueva y linda preocupación, lo que les refiere un nuevo desafío y reflexión sobre el cómo presentar libros católicos a musulmanes conversos al cristianismo.

 

¿Qué desafíos podes transmitir para la rica experiencia de la oficina del libro de la Conferencia Episcopal Argentina?

 

Los desafíos son constantes, permanentes. El rol de una editorial, en primer lugar, es su compromiso para con la cultura. Aquí surgen las primeras preguntas ¿Cómo poder hacer cómo editorial católica, ayudar a evangelizar la cultura? ¿Cómo poder transmitir a Cristo en los contextos propios de nuestro país? ¿Cómo poder transmitir el Evangelio en las problemáticas propias de nuestro país? Otro gran desafío, los libros son diálogo, comunican; entonces; ¿Cómo poder “ser” diálogo con ideas distintas? ¿Cómo poder “ser” diálogo con contextos distintos?

 

Las nuevas generaciones nos proponen un nuevo desafío. Hoy en día contamos con Millennials, también conocidos como generación “Y”; de la misma manera los Centennials, flamantes sucesores de los Millennials, que son los jóvenes nacidos a partir de 1997, que tienen formas muy distintas de comunicarse. Uno de los oradores en estas Jornadas nos compartió que “en muchas ocasiones estas nuevas generaciones son más lectoras que las anteriores. La forma de comunicación es distinta. Aquí es donde, como editorial, nos corresponde un contante movimiento, una renovación para ser atractivos a estas nuevas generaciones lectoras. El Santo Padre Francisco nos invita a ser una Iglesia en salida; debemos ser una editorial en salida.

 

Finalmente, como un “último desafío”, un tanto “más comercial”, reflexionamos sobre el cómo poder llegar a un contexto más amplio más amplio a nivel internacional.

 

Imaginamos que se ha conversado mucho sobre la lectura y las nuevas tecnologías. ¿Qué aspecto de este tema te parece relevante y que haya estado presente en el encuentro?

 

El mundo virtual, el mundo digital, las nuevas tecnologías fueron los ejes abordados con mayor frecuencia porque para las editoriales representa una problemática y un desafío enorme ya que es un cambio completo de paradigma. Hubo tres grandes oradores de grupos con presencia en Europa y América del Norte. Nos transmitieron sus experiencias de tantísimos años, su vanguardia a la hora de la edición digital, resaltando la importancia de contar con el libro en papel pero también con la clave en el enlace a la plataforma virtual. Allí uno puede encontrar complementos tales como: recursos, videos y otros beneficios; lo cual nos da una suerte de ejemplo a seguir.

 

Por otro lado, la importancia del nuevo estereotipo de cliente. No aquel que ve el nuestro libro en una librería, sino el “cómo salir” y ser atractivo para este cliente en el mundo digital, en el mundo virtual. Por último, reflexionamos sobre la venta virtual. Allí, desde Amazon Italia nos compartieron parte de estas bondades digitales.  

 

Damos gracias a Dios y a la Santísima Virgen María por este enriquecedor encuentro.

 

Oficina del Libro de la CEA

Oficina de Prensa y Comunicación

Conferencia Episcopal Argentina

Documentos disponibles:
Jornadas-Internacionales-de-la-Edicion-Catolica.-Testimonio-Oficina-del-Libro-010719.pdf





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